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EL ORDEN SENSORIAL DE F. A. HAYEK: Una Perspectiva Evolucionista

Por Jack Birner‡

Introducción

La pregunta que voy a abordar en este artículo se refiere a la teoría de F.A. Hayek sobre El orden sensorial, y si la misma contiene o no una teoría de la psicología evolutiva. La respuesta a esta pregunta ha sido afirmativa [2] (incluso la mía). Sin embargo, luego de reflexionar, descubrimos que el asunto no es tan simple. Las características que se sugerirán aquí tomarán en cuenta dos aspectos de la pregunta en cuestión. La respuesta a la parte evolutiva sería: “no, pero…”. Una característica aún más profunda y amplia es la que se encarga de responder si El orden sensorial es realmente una teoría psicológica.

La teoría de Hayek y su historia

En el prólogo de El orden sensorial, Hayek dice que durante mucho tiempo, él tuvo la respuesta a un problema que aún no conocía [3]. Esto resulta curioso, ya que hablamos de un hombre que en todos sus trabajos da una definición clara sobre el problema que quiere resolver, y luego diseña el programa de investigación necesario para encontrar una solución [4].

¿Cuál era el problema según Hayek en 1952? El primer capítulo está dedicado a responder esta pregunta. El siguiente es, tal vez, el mejor resumen: “La existencia de un mundo fenoménico diferente al mundo físico es lo que constituye el problema principal” (El orden Sensorial: 1.84). La razón por la que esto es un problema para Hayek es que él quiere dar una explicación de la mente, o de la consciencia exclusivamente en términos de las leyes de la física. Esa es la razón por la que él describe el problema recién mencionado de forma alternativa, en función de la reproducción del “macrocosmos”, es decir del orden físico (podríamos agregar “allí afuera”) por el “microcosmos” de la mente (u orden sensorial), que obedece las mismas leyes que aquellas que gobiernan en el macrocosmos. Desde el punto de vista de la mente (por así decirlo), la correspondencia entre la mente (“microcosmos”) y el orden físico (“macrocosmos”) es descripta a veces como una relación de intencionalidad, que es un aspecto importante en el problema mente-cuerpo. Otro aspecto a tener en cuenta sobre este problema es la existencia de un ámbito fenoménico subjetivo que es diferente al macrocosmos. Este problema es conocido también como el problema de los qualia. Cito a Ed Feser:

“Qualia are considered philosophically problematic insofar as it is difficult to see how their subjectivity can be explained in terms of the objective features of the brain and nervous system.  Facts about the subjective feel of conscious experience seem clearly to be facts over and above the facts, however complex, about firing patterns of neurons in the brain, the wiring of the nervous system, or indeed physical facts of any kind; increasing knowledge of the latter would seem never to add up to knowledge of the former, to knowledge of what it’s like to experience pain, the scent of a rose, the taste of coffee, or what have you.  The mind would thus seem to be something non-physical, something existing over and above the brain; yet how could it be, given the evident dependence of mental events on brain events, and in particular the causal relations holding between the two?” (Feser 2003: 3; cursiva en el original. La nota al pie ha sido eliminada).

Hayek habla a propósito del orden sensorial: las impresiones sensoriales de un fenómeno mental y particular (incluida la consciencia)  generalmente adquieren su significado subjetivo solo por su ubicación en una estructura de conexiones neuronales.

“The contention that all the attributes of sensory qualities (and of other mental qualities) are relations to other such qualities, and that the totality of all these relations between mental qualities exhausts all there is to be said about the mental order, corresponds of course, (perhaps we should say follows from) the conception of mind itself as an order of events. [5] And with the recognition that mind itself, and all the attributes of mental events, are a complex of relations, there disappears of course the need for any peculiar kind of things which by themselves have attributes which constitute them [sic] a peculiar ‘substance’.” (The Sensory Order: 1.105)

El resúmen más breve de la teoría de Hayek puede encontrarse en la primer oración del capítulo dos, donde él escribe “the sensory qualities known to us from our subjective experience form a self-contained system so that we can describe any of these qualities only in terms of its relations to other such qualities”. Para explicar el sistema de estas “características”, es decir, impresiones sensoriales y otros fenómenos mentales, Hayek dice que “it will be necessary to show how in a physical systems known forces can produce such differentiating relationships between its elements that an order will appear which strictly corresponds to the order of the sensory qualities.” (The Sensory Order: 2.1, cursiva en el original). Entonces, además de ser estructuralista, la teoría de Hayek sobre la mente es también físicalista. Estos dos aspectos nos remontan al periodo en el que Hayek comenzó a trabajar en su teoría de la mente.

Su primera aparición documentada data de septiembre de 1920, en un manuscrito que hoy en día es parte de los archivos Hayek en la Institución Hoover. Contiene  los resultados de los estudios de Hayek durante el trimestre de invierno del año académico 1919-20, cuando él pasó “ABOUT SIX TO EIGHT WEEKS” (Kresge & Wenar 1994: 63) en Zúrich. El había vuelto de la guerra hacía un año, cuando tenía 20. Durante su trabajo de soldado en el pelotón médico en el frente del Río Piave había visto cabezas heridas (“el cerebro expuesto”), lo que generó su interés en el funcionamiento del cerebro humano [6].  Luego de la guerra, comenzó a estudiar la literatura relevante y fue al laboratorio de la anatomía cerebral conducido por Konstantin (o Constantin) von Monakow [7] (Kresge & Wenar 1994:64) en Zúrich. También sabemos (ibid.) que asistió a clases durante una de las cuales escucho sobre Moritz Xchlick y la publicación de su reciente libro sobre epistemología (Allgemeinte Erkenntnnislehre, 1918).

El estructuralismo de la teoría de la mente de Hayek [8] es algo que comparte con la teoría del conocimiento de Schlick. Ni el manuscrito ni El orden sensorial contienen referencias hacia Schlick. Sin Embargo, en el libro está señalada como una de las publicaciones que más influenciaron las ideas de Hayek. La descripción del fenómeno mental en términos estructurales es un elemento que habilita a Hayek a despegarse de lo que era en ese entonces una de las teorías más influyentes de la percepción y el conocimiento: el monismo neutral de Ernst Mach. Según esa teoría, existe una relación de correspondencia de uno a uno entre el estímulo sensorial y las percepciones subjetivas y el conocimiento. Fue este aspecto precisamente el que Hayek criticó y el que lo llevo a desarrollar una teoría alternativa [9].

El descubrimiento de Hayek sobre Schlik durante su estadía en Zúrich fue todo un desafío: ¿podría yo descubrir quién fue el profesor que hizo que Hayek pusiera atención en Schlik? Para descubrirlo, contacté al Dr. Heinzpeter Stucki, el archivista de la Universidad de Zúrich [10]. El me comentó que Hayek no estaba registrado oficialmente como estudiante, pero que podía asistir a las clases como “Höhrer”. Esto me llevó a pedir la lista completa de clases dictadas durante el semestre que Hayek estuvo allí. El candidato más probable parecía ser Gotthold Lipps, quien dictaba clases sobre psicofísica, un tema que tiene un papel importante en el manuscrito de Hayek (y en El orden sensorial). Lo que intercede a favor de esta hipótesis es que Hayek utiliza ejemplos de la psicología evolutiva, un tema que Lipps desarrolla en su trabajo publicado y sobre el cual dictó clases (daba cursos de didáctica). Sin embargo, dos aspectos argumentaban en contra. Primero, Lipps es el autor de un pequeño libro sobre psicofísica [11], con incursión en la teoría del conocimiento, en la que Schlick ni siquiera es mencionado.  Segundo, él era un catedrático completo, lo que no corresponde a los recuerdos que Hayek tenía de un profesor joven (Kresge & Wenar: 64). Esta razón también excluía a A. Werschner, otro catedrático que daba un curso sobre la filosofía natural. Solo quedaban dos candidatos posibles, ambos “Privatdozenten”: K. Dürr, quien daba un curso introductorio sobre filosofía y J. Suter, quien enseñaba sobre “la literatura filosófica de 1918-19”. Por esta razón, Suter parece ser el candidato más adecuado, pero a falta de evidencia, mi investigación en la Universidad de Zúrich había concluido [12].

Las cosas no mejoraron al ver la posibilidad de que Hayek haya asistido al Eidgenössische Technische Hochschule. Tampoco estaba registrado allí, pero puede haber ido a las clases de cualquier manera. Conclusión: Hayek puede haber escuchado sobre Schlick por mucha gente, tanto en la Universidad como en el Politécnic, incluso tal vez por Albert Einstein [13], que conocía a Schlick. Puede haberlo escuchado también del mismísimo Monakow, quien aún hoy en día es conocido por su teoría “estructural” sobre el funcionamiento del cerebro. Von Monakow descubrió la diásquisis, una afección en la que una lesión en cierta parte del cerebro impide que las demás funcionen [14].

Dado el descubrimiento de material autobiográfico como cartas, tengo que dejar el asunto a un lado. Afortunadamente, esto no afecta en nada el contenido de este ensayo. Las fuertes influencias “estructuralistas” que Hayek tenía (Schlick y Monakow) se ven claramente en esta incursión histórica. Otro asunto que mi breve viaje de vuelta en el tiempo pudo aclararme, era que Hayek acertó al elegir Zúrich, ya que era uno de los centros de educación científica e investigación más avanzados y reconocidos del mundo durante el periodo post-guerra.

¿Es El orden sensorial una teoría psicológica?

Un aspecto de la teoría de Hayek que he dejado deliberadamente de lado trata sobre qué tipo de teoría es esta. Como dije en la introducción, algunos autores a veces consideran a El orden sensorial como una teoría de la psicología. Yo mismo lo he hecho, pero esto reflejaba solo una visión unilateral. A pesar de que siempre he presentado El orden sensorial  como una teoría sobre el problema mente-cuerpo [15], mi pregunta sobre “the surprising place of cognitive psychology in Hayek’s research programme” (1999) se concentra solo en los aspectos psicológicos de El orden sensorial. Esa pregunta ha sido mal planteada. Es verdad que el manuscrito de El orden sensorial contiene una teoría que explica la percepción sensorial. Sin embargo, su principal propósito es una cuestión diferente. Para ello, deberíamos preguntar ¿qué es la mente?” o “¿Cómo es que la conciencia surge de procesos en el cerebro puramente físicos?”. El orden sensorial  no es simplemente un libro sobre psicología, sino sobre la teoría de la mente [16]. Hayek escribe que él ha elegido el análisis de la percepción como un ejemplo de cómo trabaja el cerebro. Este no es el tema principal del libro, pero sí una ilustración de su solución para el problema mente-cuerpo:

“What has been attempted here might be described as a sketch of a ‘theoretical psychology’ in the same sense in which we speak of theoretical physics or theoretical biology. We have attempted an explanation of the principle by which we may account for the peculiarities which are common to all processes which are commonly called mental.” (The Sensory Order: 8.65, cursiva agregada)

Frente a esta situación no sorprende que Hayek no haya  usado su teoría de la percepción en sus ideas económicas, en las que la percepción de los individuos es un factor explicativo de suma importancia [17].

Empirismo

Lo que Hayek tenía en común con Mach, y Schlick, fue su empirismo. Sin embargo, él no sentía que habían resuelto el problema presentado por Kant, por ejemplo que necesitamos un marco mental pre-existente que haga posible nuestra conciencia y conocimiento sobre el mundo:

“There is … a part of our knowledge which, although it is the result of experience, cannot be controlled by experience, because it constitutes the ordering principle of that universe by which we distinguish the different kinds of objects of which it consists and to which our statements refer.” (The Sensory Order: 8.18)

Pero en vez de criticar el empirismo desde afuera, Hayek dice que él ha llegado a una conclusión lógica:

“in so far as we have been led into opposition to some of the theses traditionally associated with empiricism, we have been led to their rejection not from an opposite point of view, but on the contrary, by a more consistent and radical application of its basic idea. Precisely because all our knowledge, including the initial order of our different sensory experiences of the world, is due to experience, it must contain elements which cannot be contradicted by experience.” (The Sensory Order: 8.27) [18].

Para un cognitivista moderno, la explicación de cómo surgió este marco basado en la experiencia tomaría la forma de una explicación evolutiva. Pero cuando Hayek escribió El orden sensorial, esta cuestión no era para nada obvia.  Eso me lleva a la próxima pregunta.

El orden sensorial, ¿es una teoría evolutiva?

Luego de descartar la idea de que El orden sensorial es simplemente una teoría psicológica, me queda la otra mitad de la pregunta: ¿es una teoría evolutiva? Para eso, es útil distinguir dos significados de “evolutiva”. Un significado es el neutro “de desarrollo”, y en este sentido la teoría de Hayek sobre la mente, es una teoría evolutiva. Este se ve en el manuscrito, que discute cómo se desarrollan las redes neuronales que constituyen nuestra mente y cómo el funcionamiento de la mente es parte de su desarrollo. El cerebro (o la mente) funciona a través del proceso de establecimiento de relaciones estructurales. Mientras la variación aleatoria no es parte, sí existe una retención selectiva en la forma del fortalecimiento de la vía neuronal. Pero esto sucede bajo la influencia de su activación repetida. Él habla del fortalecimiento de las vías que son motivadas usualmente, sin decir nada sobre la eliminación de otras.

“Sense experience (..) presupposes the existence of a sort of accumulated ‘knowledge’, of an acquired order of the sensory impulses based on their past co-occurrence; and this knowledge, although based on (pre-sensory) experience, can never be contradicted by sense experiences and will determine the forms of such experiences which are possible.” (The Sensory Order: 8.8) [19]

Sin embargo, él menciona que las nuevas y futuras impresiones sensoriales pueden dar lugar a revisiones (ontogenéticas) de nuestro conocimiento (El orden sensorial: 5.26-29, por ejemplo). El párrafo citado indica una separación entre el desarrollo (mayormente filogenético) del marco mental pre-impreso, por un lado y la formación ontogenética de las conexiones neuronales que aparentemente constituyen una parte más adaptable, por el otro.

En el sentido biológico diferente, neo-Darwiniano, “Evolutivo” se refiere a procesos de variación aleatoria y retención selectiva. Si se aplica a fenómenos mentales, este tipo de teoría evolutiva debería ofrecer una explicación sobre la contribución de los procesos mentales a la supervivencia del organismo. Hay algunos indicios de esto en El orden sensorial.  Puede encontrarse en el párrafo en el que Hayek dice que la mente forma una reproducción parcial del ambiente y “thereby enables the organism which contains such a partial reproduction of the environmental order  to behave appropriately towards its surroundings”. (El orden sensorial: 1.49, el énfasis es mio).  El capítulo más relacionado a la evolución es el cuarto, donde encontramos algunos indicios más fuertes (en el manuscrito de 1920 [20] no hay ninguno): “The question what determines (or what is meant by) purposiveness is in the last instance really the same question as that of what ensures the continued existence of the organism.” (The Sensory Order: 4.13, el énfasis es mio).

Una hipótesis evolutiva se plantea en 4.23:

“We must probably assume that, in the course of evolution, the original direct connexions between particular stimuli and particular responses are being preserved, but that control mechanisms are being superimposed capable of inhibiting or modifying these direct responses when they are inappropriate in view of other simultaneously acting stimuli.”

La pista más fuerte en una perspectiva biológica y evolutiva se encuentra en 4.5. Luego de explicar que el propósito de este capítulo es analizar el sistema nervioso central como un sistema de control superpuesto en un organismo viviente en vez de analizarlo como un sistema autosuficiente y completamente centralizado en sí mimo,  Hayek escribe:

“At the same time it should be pointed out, however, that in one respect in which the task we are undertaking is most in need of a solid foundation, theoretical biology is only just beginning to provide the needed theoretical tools and concepts. An adequate account of the highly purposive character of the action of the central nervous system would require as its foundation a more generally accepted biological theory of the nature of adaptive and purposive processes than is yet available.” (The Sensory Order: 4.5; el énfasis es mio)

Hayek desarrolla sus propias ideas en esta dirección (aunque no por mucho tiempo) [21]. Ni El orden sensorial ni el manuscrito discuten el desarrollo de las complejas redes neuronales de múltiples capas que constituyen la mente en términos de variaciones aleatorias y retención selectiva. Es verdad, El orden sensorial  es para aprender (por ejemplo, el resumen de la teoría en 8.12-8.16), y el aprendizaje involucra la adaptación. Pero mientras que cada teoría de la psicología evolutiva es, o debería ser una teoría de aprendizaje, no todas las teorías de aprendizaje son teorías de la psicología evolutiva.

Un concepto adicional es que, si Hayek hubiese querido presentar una teoría evolutiva en ese momento, se hubiera concentrado más en los aspectos filogenéticos del desarrollo mental. En vez de eso, él dice que la descripción de los mecanismos ontogeneticos son suficientes para ilustrar los principios según los cuales funciona la mente. [22]

Sin embargo, si seguimos los indicios de Hayek en un marco evolutivo en el capítulo 4, no sería difícil leer el último capítulo con ojos evolutivos. Si lo hiciéramos, llegaríamos a la conclusión que la discusión de carácter empirista de la teoría en el capítulo 8 no puede desarrollarse plenamente excepto que se la ubique en una perspectiva evolutiva. Sin ella, el empirismo de la teoría de Hayek presupondría un mundo estático en el que experiencias del pasado seguirían siendo útiles para la dirección mental del comportamiento actual y futuro. Pero esto aplica para todas las doctrinas empiristas, y dichas doctrinas han existido por miles de años sin dirigirse a la evolución. Hayek comenzó a hacerlo recién en sus últimos trabajos, no en El orden sensorial. El orden sensorial es evolucionario solamente porque contiene los primeros bosquejos de un programa de investigación evolutivo. Se siguió desarrollando en publicaciones. “Rules, Perception and Intelligibility” (1963) describe cómo la percepción humana y el comportamiento se guían por reglas, cómo estas reglas se aprenden  y se comunican, hasta qué punto estos procesos envuelven un marco implícito o tácito.

Mientras esta publicación se concentra en el funcionamiento de las reglas,  en “Notes on the Evolution of Systems of Rules of Conduct. The Interplay between Rules of Individual Conduct and the Social Order of Action” (1967), el énfasis esta en la evolución. Lo que Hayek discute allí no es la evolución de la mente, sino la evolución cultural. Otra elaboración de las ideas evolutivas de Hayek existe en The Fatal Conceit (1988). He discutido esto en otra parte. [23] Ahora quisiera discutir el carácter fisicalista de la teoría de Hayek.

Fisicalismo, materialismo y reduccionismo

Es un hecho que el  “mentral research programme” al que Hayek comenzó a dedicarse en 1920 sin dudas ha sido completado (o ha progresado de manera significativa). Esto puede deducirse de la introducción de David Chalmers para una de las secciones de los simposios de Third Tucson Discussions and Debates sobre el tema Toward a Science of Consciousness (Hameroff  y colaboradores 1999):

It is natural to hope that an explanation of consciousness might be a physical explanation. Physical explanations have had extraordinary success elsewhere in science… Given this track record, one might well expect that a physical explanation of consciousness is on its way. And indeed, investigation of the neurophysiological basis of consciousness has already yielded many insights into the phenomenon. But some have argued that any purely physical explanation of consciousness will be incomplete. (p. 1)

Aún más adelante, Chalmers ve necesario hacer una distinción que Hayek introdujo ocho décadas antes:

Theorists of consciousness are divided both on whether there is an explanatory gap, and on what follows. Some deny that there is any gap, or suggest that it has been closed. It is probably fair to say, however, that most think that there is at least a prima facie explanatory gap. From here, some go on to argue that consciousness is not a wholly physical phenomenon, while others resist this conclusion. (p. 1) [24]

Para Hayek, la consciencia es un fenómeno físico. Esto trae varios problemas. Uno fue propuesto por Popper, quien sostiene una teoría  interactiva  de mente-cuerpo indeterminista y dualista.  Él objetó que desde que El orden sensorial parecía ofrecer una teoría de la mente que no solo era fisicalista sino también determinista, no sería posible explicar las funciones descriptivas (y por ende, explicativas) y las funciones críticas del lenguaje [25]. Un problema relacionado es el de la explicación: si la mente es idéntica el cerebro (físico), ¿cómo podemos explicar su funcionamiento independiente? Hayek dedicó un ensayo a este problema, pero nunca fue publicado (ni terminado, aparentemente), “Within System and about Systems; A Statement of Some Problems of a Theory of Communication”. En el primer párrafo Hayek repite de manera virtual la conclusión a la que ha llegado en El orden sensorial, específicamente/a saber que “any apparatus of classification must possess a higher degree of complexity than is possessed by the objects which it classifies… [T]herefore, the human brain can never fully explain its own operations.” (El orden sensorial: 8.68).  Sin embargo, en el ensayo “Systems” no se discute sobre la mente en particular, sino que se extiende a todos los sistemas causales.

Al desarrollar este argumento en “Systems”, los aspectos ontológicos y epistemológicos de la teoría de la mente de Hayek se entrelazan. En El orden sensorial él asegura que su teoría es menos materialista que las teorías dualistas porque no asume la existencia de una entidad “mente” por separado: “While our theory leads us to deny any ultimate dualism of the forces governing the realms the mind and that [sic] of the physical world respectively, it forces us at the same time to recognize that for practical purposes we shall always have to adopt a dualistic view” (El orden sensorial: 8.46). Esto sucede porque no podemos producir una descripción o explicación completa de los procesos que constituyen nuestra mente y sus relaciones con el orden físico sin incluir una descripción del subconjunto de esos mismos procesos que realizan la descripción y la explicación, es decir, la mente en sí misma. De nuevo, esto sucede porque (como repite Hayek en 8.44) su teoría no es una teoría de doble aspecto. El orden completo de todos los procesos neuronales, “if we knew it in full, would … not be another aspect of what we know as mind but would be mind itself”.

El orden sensorial es una teoría de identidad de la mente: mas que negar la posibilidad de reducir el orden sensorial al orden físico, esa teoría dice que no hay necesidad de hacer eso. Aquí, como en muchos otros asuntos, Hayek es un fiel seguidor de Schlick [26]. En el orden físico, los eventos son similares o diferentes si producen efectos externos similares o diferentes. En el orden sensorial, los eventos se clasifican según sus propiedades sensoriales. Las dos maneras de describir el fenómeno mental, en términos físicos y subjetivos, son dos maneras alternativas de describir el mismo fenómeno. Para el propósito práctico de describir la mente, Hayek puede ser llamado un dualista, ya que nosotros utilizamos diferentes maneras de describir lo mental y lo físico, sin embargo, el orden ontológico es uno solo.

En la literatura moderna de mente-cuerpo, el problema que Hayek propone es referido a veces como “explanatory gap” (compare la cita de Chalmers arriba). Joseph Levine, por ejemplo, observa que una consciencia materialista y procesos cerebrales son ontológicamente idénticos:

“Metaphysically speaking, there is nothing to explain. That is, we are dealing with a brute fact and there is no further source (beyond the fact itself) responsible for its obtaining. The fact that we still find a request for an explanation intelligible in this case shows that we still conceive of the relata in the identity claim as distinct properties, or, perhaps, the one thing as manifesting distinct properties. We can’t seem to see the mental property as the same thing as its physical correlate. But though our inability to see this is indeed puzzling, it doesn’t show, it can’t show, that in fact they aren’t the same thing. For what is the case cannot be guaranteed by how we conceive of it.” (Hameroff et. al. 1999: 11).

Esta es justamente la posición de Hayek.

Aquí se tratan problemas fundamentales. Según Hayek, el hecho de que la mente sea quien da las explicaciones significa que no puede dar una explicación completa de sí misma. Este es propuesto como un problema de complejidad, pero que a su vez puede encerrar dos problemas diferentes: el de la auto-referencia y la imposibilidad práctica de saber todas las condiciones iniciales relevantes [27]. Por esta razón, “to us mind must remain forever a realm of its own which we can know only through directly experiencing it, but which we shall never be able fully to explain or ‘reduce’ to something else.” (El orden sensorial: 8.98, cursiva en el original). Lo que podemos ofrecer son “explicaciones del principio”. Entonces, paradójicamente la teoría fisicalista de la mente de Hayek le sirve para rescatar la posición autónoma del fenómeno intencional y sus consecuencias, incluso el subjetivismo en el metodológico sentido que

“the facts of the social sciences are merely the opinions, views held by the people whose actions we study. They differ from the facts of the physical sciences in being beliefs or opinions held by particular people, beliefs which as such are our data, irrespective of whether they are true or false, and which, moreover, we cannot directly observe in the minds of people but we can recognize from what they do and say merely because we have ourselves a mind similar to theirs.” (Hayek 1955: 28; el énfasis es mío)

Como hemos visto, para Hayek no existe el problema de reducir lo mental a lo físico no existe. Podemos hablar de una reducción, en tanto y en cuanto sea la traducción de un sistema conceptual que describe la mente a uno que describe el orden físico. Esto es posible en principio, pero no hecho por nosotros, ya que eso involucraría directamente a nuestras mentes. Sin embargo, podríamos construir un autómata (una computadora) para llevar a cabo este programa de traducción (El orden sensorial: 8.81). Esto, por supuesto, crearía el problema de cómo un autómata puede comunicar sus resultados hacia nosotros. Este problema de comunicación es tratado en el manuscrito “Systems”. Somos nosotros, los humanos, con nuestras mentes humanas, quienes nos interponemos en el medio de una descripción fisicalista completa [28]. Los datos básicos de las ciencias sociales son las opiniones de los agentes, y no hay forma de reducir una ciencia social, es decir, el estudio del comportamiento humano, para analizar procesos mentales.

En el último capítulo de El orden sensorial Hayek muestra las consecuencias de su análisis de ciencia social: [29] al hecho de que no podemos alcanzar más de una explicación para el principio, le sigue que nunca podrá lograrse  una unificación completa de las ciencias. “In the study of human action, in particular, our starting point will always have to be our direct knowledge of the different kinds of mental events, which to us must remain irreducible entities.” (El orden sensorial: 8.88). El énfasis que recae en “for us” se ha discutido anteriormente. La mente humana nos permite alcanzar conocimientos del mundo pero también impone límites sobre lo que podemos saber.

Conclusión: mente, evolución y psicología evolutiva

Un programa de investigación influyente en la psicología evolutiva contemporánea está asociado con los nombres de Leda Cosmides y John Tooby. Es descripto por Barkow, Cosmides & Tooby en la introducción de The Adapted Mind. Una parte de su enfoque dice que “[e]volutionary psychology is simply psychology that is informed by the additional knowledge that evolutionary biology has to offer, in the expectation that understanding the process that designed the human mind will advance the discovery of its architecture.” (Barkow y col. 1992: 3).  La segunda parte dice que la psicología evolutiva “unites modern evolutionary biology with the cognitive revolution in a way that has the potential to draw together all the disparate branches of psychology into a single organized system of knowledge.” (ibid.: 3). La tercera, un componente muy ambicioso, dice que “to clarify this new field, by focusing on the evolved information-processing mechanisms that comprise the human mind, [evolutionary psychology] supplies the necessary connection between evolutionary biology and the complex, irreducible social and cultural phenomena studied by anthropologists, economists and historians.” (ibid.: 3). Los autores quieren alcanzar la “integración conceptual” para la ciencia social, y piensan que ya ha sido alcanzada en las ciencias naturales: la eliminación de contradicciones entre las leyes y los datos de varias disciplinas. Lo llaman consistencia mutua [30]. Las premisas sobre las cuales se basa este programa son que existe una naturaleza humana universal a nivel psicológico (y no necesariamente a nivel cultural), que los mecanismos psicológicos que constituyen esta naturaleza son el resultado de la selección y adaptación, y que esos mecanismos pueden ser adaptados a cazadores-recolectores de Pleistoceno que al mundo moderno (ibid.: 5). [31]

En Barret, Dunbar & Lycet 2002 se propone un  segundo programa de investigación sobre psicología evolutiva. Ellos dividen el campo de estudio del comportamiento humano en dos subdominios. Uno es la ecología humana del comportamiento, que “focuses on measuring differences in reproductive success between individuals in relation to differences in the behavioural strategies they follow…” (Barrett y col.  2002: 8). La cultura corresponde a este dominio. Ellos lo distinguen de la psicología evolutiva, propiamente dicha, que tiene como objetivo “ to identify the selection pressures that have shaped the human psyche over the course of evolutionary time, and then test whether our psychological mechanisms actually show the features one would expect if they were designed to solve these particular adaptive problems.” (ibid.: 10). La parte más ambiciosa del programa de  Tooby y Cosmides tiene como objetivo una integración de estos dos campos en uno solo.

El propósito de Hayek en El orden sensorial no es crear una teoría del comportamiento humano [32]. En The Counterrevolution of Science  esto fue elaborado en forma de crítica a la idea de que las explicaciones de las ciencias sociales tienen que estar basadas en, o son reducibles a cualquier tipo de psicología, incluso el conductismo [33].

Hayek comparte con Tooby, Cosmides y Barkow las ideas de que los seres humanos tienen las mismas formaciones psicológicas que es el resultado de la evolución, y que la mente humana quedo atrás en el desarrollo cultural en el sentido de que esta más adaptado al ambiente de cazadores-recolectores primitivos de la sociedad moderna [34]. Sin embargo, hay algunas diferencias a resaltar. Uno se encarga del modelo de la mente. La teoría esctructural de Hayek ve la mente como un órgano general [35] en vez de tratarlo como si consistiera de funciones localizadas o módulos (The “Swiss army-knife model of the mind” propuesto por Cosmides y Tooby) y  es consistente con la teoría estructural de Hayek. La otra diferencia es metodológica y concierne la relación entre la mente y la ciencia social o ecología del comportamiento humano. Aquí, las ideas de Hayek acuerdan más con Barrett, Dunbar y Lycett, quienes argumentan a favor de mantener los dos campos por separado.

Notas

Traducción, con el permiso del autor, a cargo de Lara Guelman (Translator with a degree in Literary, Technical and Scientific Translation) y revisión técnica de Désirée Sigaudo Grant.

[1] Agradezco a Bruce Caldwell por permitirme citar partes que no fueron publicadas de los Archivos Hayek sobre la Institución Hoover en la Universidad de Stanford. Estoy muy agradecido al Dr. Heinzpeter Stucki, el archivista de la Universidad de Zúrich por la copia del calendario de cursos de 1919-20 de la Universidad de Zúrich y otros detalles importantes. También a la Dra. Corina Tresch De Luca de los archivos ETH por ayuda similar con calendarios de otra institución académica en esa ciudad,  Eidgenössiche Technische Hochschule.

[2] Compare, por ejemplo Smith 2003,que es una version extendida de su discurso para el Nobel.

[3] “[En 1920]… creí haber encontrado la respuesta a un problema importante, no podía explicar con precisión cuál era el problema” (El orden sensorial. V).

[4] Tal vez en el manuscrito Hayek intento desarrollar una psicología de percepción, pero esta evoluciono casi espontáneamente en una  teoría de mente-cuerpo sin que Hayek se dé cuenta. El título del manuscrito: Beiträge zu einer Theorie der Entwicklung des Bewusstseins” fue la razón por la cual Hayek no sabía el propósito del mismo.

[5] Esto sugiere que Hayek también se refiere a un orden temporal que encaja en el carácter descriptivo o “dinámico” de su teoría. Compare El orden sensorial: 2.21

[6] Esto es lo que el le dijo a Axel Leijonhufvud en una entrevista (comunicación privada).

[7] El calendario de la Universidad de Zúrich muestra que esta práctica se llevaba a cabo diariamente.

[8] Ed Fesser, en su excelente tesis de PhD.

[9] Compare De Vries 1994.

[10] Fui dirigido hacia el por la amabilidad de Ernst Fehr.

[11] Lipps 1921, que es la tercera edición.

[12] En la pag. 24 del manuscrito, Hayek se refiere a Psychologie de William James, traducido por M. Dürr. No he tenido chance de chequear si se  trata del mismo Dürr que aparece en el texto (en ese caso, el primer habría sido confundido).

[13] En la pág. 39 del calendario de cursos de la Univ. De Zúrich se menciona a Einstein como encargado de un curso (“Lehrauftag”) aún sin ser parte del grupo de profesores. Desde 1914 el fue director del Wilhelm Physical Institute en Berlín y profesor en la universidad del lugar.

[14] Según Von Monakow (1853-1930), el cerebro consiste de una red neuronal expandida, que funciona como un todo, sin funciones especificas en áreas determinadas (http://www.coe.tamu.edu/epsy/faculty/CRiccio/EPSY621notes-riccio.html, accessed 5 November 2003).

[15] Por ejemplo en Birner 2001 y 1995.

[16] Popper nunca pensó diferente. Compare la carta critica que le escribió a Hayek luego de recibir una copia de El orden sensorial (lo discuto en mi a1999). En el prólogo, popper es una de las personas a que Hayek agradece por comentar borradores previos (los otros don Ludwig von Bertalanffy y John Eccles). Fesser 1999 contiene un sofisticado análisis de la teoría de Hayek de mente-cuerpo.

[17] Hayek rechaza explícitamente una reducción del fenómeno económico a mecanismos psicológicos. Las razones recaen en las “consecuencias filosóficas” (el título del último capítulo de El orden sensorial) que el explica de su teoría de la mente. Esto se discute en Birner 2010.

[18] Esta idea está claramente representada en el manuscrito: “Gewiss ist es ein auf die Spitze Treiben des Empirismus wenn wir auch das Verhältnis der Empfindungen untereinander durch die Erfahrung entstehen lassen; aber gerade dadurch werden viele seiner Härten gemildert, da danach die uns mittels dieser Empfindungen vermittelten Erfahrungen sich immer innerhalb dieser Verhältnisse halten müssen und diese daher einen gewissen apriorischen Charakter erhalten. “ (p. 40).

[19] Esto es la elaboración de una idea del manuscrito (p.29), en la que este “principio de  conservación) se expresa mas fuerte y con términos mas crudos. Hayek dice que encuentra alentador que nada de lo que alguna vez experimentamos, se pierda: “Die Vorstellung dass dies [the existence of intuition] darauf beruht, dass auch scheinbar entschwundene Kentnisse weiterwirken, dass also nichts, gar nichts, dass wir einmal erfahren haben, ganz verloren geht, is überaus ermutigend.”

[20] Lo que Hayek si discute en el manuscrito es la competencia entre las impresiones sensoriales. Solo aquellas que estimulan los caminos neuronales con mas conexiones se vuelven parte de la conciencia (manuscrito: 25). En su trabajo más reciente, la competencia es mencionada como un mecanismo básico de la evolución (por ejemplo en The Fatal Conceit).

[21] Y cuando lo hizo, eventualmente se  distancio del Darwinismo, ya que prefirio la explicacion de Lamarck sobre la evolucion en The Fatal Conceit. Para discutir, compare Birner 2001.

[22] Pero Hayek dice que no había suficiente información sobre la filogénesis, razón por la que el se abstrajo del tema en ese momento.

[23] In Birner 2001.

[24] Feser menciona a Chalmers como uno de los dos filosofos (aparte de Feser mismo, el otro mencionado es Howard Robinson) que reconocen (y rechazan) la combinacion de una teoria estructural del mundo externo con una teoria estructural de la mente que se encuentra en Hayek. Feser, por otro lado, respalda la teoria de Hayek como una innovacion muy importante y original. Compare Feser 2003: 6-7.

[25] En “Language and the Body-Mind Problem”, de Popper 1974. La misma crítica es hecha en Popper & Eccles 1977: 57 ss. Estos párrafos no se refieren explícitamente a Hayek, pero están dirigidos en contra de su teoría de la mente, como comento en Birner 1999 a.

[26] Compare Schlick 1974: 299: “The resulting relationship between immediately experienced reality and the physical brain is then no longer one of causal dependency but of simple identity. What we have is one and the same reality, not ‘viewed from two different sides’ or ‘manifesting itself in two different forms’, but designated by two different conceptual systems, the psychological and the physical.”

[27] Que coinciden de manera parcial.

[28] Si dicha traduccion fuera considerada la “reduccion” de un sistema conceptual al otro, aun tendriamos una forma de reduccionismo. Esto plantea problemas dificiles sobre la reduccion, descripcion y explicacion que no voy a tratar aqui. Yo hago referencia a lo que Hayek dice sobre la reduccion y las “explicaciones del principio en “The Theory of Complex Phenomena”, por ejemplo en la pag. 39 (Hayek 1964).

[29] Seria más justo decir que el llego a esta conclusión mucho antes, o mejor dicho, la adoptó de sus antecesores en la Escuela Austríaca. En el capítulo 8 de El orden sensorial  la conclusión es provista con un respaldo basado en la teoría de mente-cuerpo de Hayek. He decidido no responder al problema de las posibles influencias reciprocas entre el programa de investigación mental de Hayek y su metodología. Esto se discute en Birner 1999.

[30] No sé si esto se ha realizado en la ciencia, y resulta difícil entender cómo la psicología evolutiva puede ayudar a hacer que la macro- y la micro-economía se mutuamente consistente.

[31] Esto esconde muchos problemas. Uno es la velocidad de la evolución. En los niveles fisiologicos y biologicos, la evolucion es (usualmente) lenta. La velocidad de la evolución mental es un problema mucho mas disputado.  Si la mente de los cazadores-recolectores ha evolucionado al punto de adaptarse a su situacion, ¿cuán rápido evolucionó? Aparentemente, (pero aquí merodea el peligro de la circularidad) rápido como para sobrevivir. Pero entonces, ¿por qué la evolución de nuestra mente se  deberia haber retrasado detras de la evolución de la cultura? La evolución cultural generalmente se considera más rapida que la evolucion cultural. Sin embargo, ¿puede ser explicada por el neo-Darwinismo?

[32] Compare El orden sensorial: 2.23

[33]

[34] Compare , por ejémplo, Hayek 1976, cap. 11, “The discipline of abstract rules and the emotions of the tribal society”.

[35] Compare también Betchel & Mundale 1996.

 

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Fecha de publicación: 24-04-2014

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